lunes, 23 de septiembre de 2013

DE BELLUM CIVILI ( La Guerra Civil).


CONFLAGRACIONES
La guerra no nos cambió, trazó fronteras infranqueables
mientras los niños eternos de la canción no querían reírse
ni esperaban lunas bordadas en la sangre escarchada de la madre.
La historia no nos cambio y nada cambia ahora
tampoco,
están perdiendo los mismos.

Soldaditos de plomo de una sola pierna avanzan en mi memoria por lugares recónditos que nunca existieron.
Tengo el recuerdo ubicuo de lo que nunca viví, tejido por imágenes palpitantes, palabras de poeta, ruidos sordos de bombas subterráneas, carteles de guerra, puños en alto, pasos del Ebro y hambre. Tanta hambre…

La utopía nuevamente perdida, nunca más perdida que en este instante.
He hundido mis manos en el polvo de las antiguas trincheras y solo quedan reflejos del carnaval andante de la España eterna y atroz.

BELLUM INTIMUM (Guerra íntima)
Quiero buscar la belleza y no la encuentro,
aspiro al culto de los astros que no poseo,
nunca como ahora todo fue tan fácil y tan vano
y nunca tan difícil.
Quiero tejer mi viaje exterior en CONSONANCIA
con mi periplo interno pero no quedan boletos en la cabina expendedora de la suerte.
Se cierran puertas gigantes que doblegan mis orejas como perra, y salen en manadas de luto lágrimas espesas y salobres.
Me he convertido en Penélope que espera a pesar de Ulises, tejiendo un manto de infinitas noches negras,
de una negrura encomiable.
Tiemblo ante las diásporas de mi destino,
mientras coso rosas en la piel
conozco las aventuras de cada uno de sus tripulantes.